Fue elegida como la primera capital del Perú, goza de innumerables parajes naturales, cuenta con una fama internacional en su música y danza, y hoy es uno de los destinos de moda para todo aventurero.
Recordamos cada 25 de abril como la fecha principal de nacimiento de la ciudad de Jauja, sin embargo, históricamente este territorio ya gozaba de una importancia social, económica y política en los Andes centrales del país, por estar ocupado por su población oriunda Xauxa huanca y los Incas, quienes habían conquistado parte del valle para adherirse al Tahuantinsuyo. Dentro de la extensa provincia que abarca Jauja contamos con 34 distritos, los mismos que tienen un sinfín de riquezas históricas, culturales y paisajísticas; cada lugar nos ofrece magníficos atractivos para poder conocer más sobre la identidad jaujina.
Y no es mentira cuando decimos que esta provincia tiene un encanto, porque ya desde años de la conquista, se escribe que, los españoles informaban sobre estas tierras como un verdadero paraíso terrenal, describían la generosidad de la naturaleza y su extensa población, incluso la comparaban como “una morada de los dioses griegos o del paraíso de Mahoma”. Razón por la cual, tal vez, Pizarro enamorado de esta parte del valle insistió en convertirla en la primera capital de la Gobernación del Virreinato de Nueva Castilla.
De aquella civilización pre inca e inca ya poco se puede apreciar en la misma ciudad de Jauja, pero sí podemos contemplar el paso de los conquistadores españoles, quienes fueron los que fijaron el ordenamiento urbano, como la división en solares, la ubicación de las iglesias, plazas y zonas de vivienda de los nativos. Sin embargo, fuera de la urbe, en las alturas, lugar donde los antiguos moradores se asentaron antes de que fueran llevados al llano, podemos aún encontrar vestigios de la presencia
pre inca, son varios los centros arqueológicos que muestran la riqueza de aquella época, uno de los más imponentes es Tunanmarca.
A distancia de la capital de Jauja, podemos constatar la majestuosidad de los paisajes naturales, desde imponentes cañones, baños termales, ríos, hasta una hermosa laguna, son un recorrido que se puede hacer turísticamente; aún más, si en cada paseo nos cuentan una leyenda o historia que narra las vivencias y peripecias de Jauja. Ser una provincia intercultural, ha forjado con el tiempo una simpática simbiosis cultural, de ella nacen la música, las danzas y las tradiciones que hoy en día son muy apreciadas por los visitantes tanto locales como de todo el mundo.
Son muchas las fechas festivas del calendario las que pueden ser atractivas para todo interesado en conocer la realidad del Perú profundo. Y Jauja es uno de esos territorios que se pueden disfrutar al cien por ciento.
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