Graciela Córdova: «Proactividad, empeño, sacrificio y ganas de crecer»

Una frase que define bastante bien la actitud de nuestra emprendedora del mes, es que con perseverancia y constancia se construyen los éxitos. Nada mejor que el testimonio de Graciela Ana Córdova Salvatierra para inspirarnos a seguir avanzando. 

Por: Verónica Lévano 

Graciela Córdova es una mujer luchadora que desde muy niña encontró en su madre el modelo perfecto de esfuerzo y trabajo incansable, dicho ejemplo la ha llevado el día de hoy a convertirse en una próspera empresaria que vende y distribuye productos de consumo masivo.

A pocos años de terminar su carrera, Graciela y su esposo Edgar Cruz se vieron separados por las exigencias de su trabajo, lo que les hizo reflexionar y optar por la docencia para mantener su hogar unido. Pese a ello, Graciela siempre tuvo en mente el ejemplo de su madre y como un ingreso permanente en casa tenía una bodega, la que siempre estaba bien surtida y en la que había creado una especie de economía circular, haciendo que su negocio rindiera al cien por ciento.

Tiempo después, tras el nacimiento de sus hijos y analizando objetivamente la situación, decide abandonar la docencia y dedicarse de lleno a su bodega, pues esta, le reportaba muchos más ingresos que su trabajo de docente. De la misma manera, en paralelo al negocio que había iniciado en casa, empezaba a comprar productos por mayor para venderlos a otras bodegas ofreciéndoles precios bastante cómodos, y es a fines de los 90’s que alquila un stand en Tiendas Espinoza, donde “Gesa” se hace más conocida y tiene buena acogida, lo que permitió ampliar aún más la variedad de productos.

En poco tiempo, hizo contacto con representantes de nuevas marcas de detergentes, pañales y otros, que la capacitaron para mejorar sus técnicas de venta, pero, esto sumado a su deseo de hacer crecer su negocio, la absorbieron demasiado los primeros años, ya que le exigía mucho sacrificio, recibir cargas de madrugada o a medianoche y no siempre estar presente para la familia. 

Más adelante se presentaría la más fuerte crisis, que estaría a punto de llevarla a la quiebra, este hecho la demandaba más constancia y control para evitar los robos tanto de usuarios internos como externos. Sin embargo, poco a poco la situación fue mejorando, pero su empeño por mantener lo que hasta el momento había logrado estaba repercutiendo en su salud y no fue hasta hace un par de años, que la pérdida prematura de su hermano, le hizo ver la situación claramente y reflexionar sobre equilibrar cada aspecto de su vida, remarcando que el verdadero éxito se da con el desarrollo y crecimiento en cada dimensión de la persona y no sólo en los negocios. 

Las buenas y malas experiencias que ha “Chelita” le han tocado vivir han servido para hacer de ella una jefa comprensiva y exigente, una empresaria que basada en el principio de proactividad busca nuevas y mejores maneras de conducir su negocio, como también una esposa y madre más dedicada que se da tiempo para compartir con los que quiere. 

Hoy en día, sus hijos, dos jóvenes profesionales integran áreas importantes de su empresa al igual que su esposo, quien desde el inicio de Gesa ha sido un gran apoyo y se ha dedicado a la mejora constante de sus sistemas.   

Nuestra emprendedora cuenta con siete tiendas y una distribuidora, que representa el 70% de su actividad, atendiendo pedidos en  Huancayo, Cerro de Pasco, Morococha, Huancavelica y buena parte de la Selva central, convirtiéndose en uno de los primeros eslabones de la cadena productiva, saltando varios niveles para ofrecer productos de precios bajos a consumidores finales.

Su deseo de hacer más y contribuir al bienestar, la ha llevado a trazar varios planes, entre los que se encuentran un proyecto de agroforestación para la producción de alimentos orgánicos cultivados con compost; el huerto urbano a través del cual reciclan botellas y obsequian plantas.

Su mensaje para las futuras emprendedoras es que analicen el panorama, organicen su tiempo, sean disciplinadas, nunca consuman sus productos sin pagarlos o tomen parte de su capital para gastos personales, se esfuercen porque todo comienzo demanda bastante sacrificio y tengan paciencia, porque los resultados toman tiempo. Por último, siempre debemos tener la apertura de aprender, porque sólo el conocimiento nos servirá para conducir mejor nuestro negocio.

• Graciela Ana Córdova Salvatierra es ingeniera metalúrgica de profesión, se ha dedicado a la consultoría y ha sido docente de la Universidad Nacional del Centro del Perú. Actualmente, continúa preparándose y aprendiendo sobre temas relativos a las ventas y administración.